Es algo que no debemos dejar para última hora, sobre todo si queremos que la calefacción de nuestra casa durante el invierno sea la óptima y nos ayude a hacer un consumo eficiente de la energía. Así que aquí van una breve guía para purgar los radiadores de la calefacción central de nuestra casa
Siendo previsores, el purgado de la calefacción central debe realizarse entre los meses de septiembre y octubre al menos una vez al año, para estar preparados para cuando llegue el frío intenso del invierno.
Esta práctica es necesaria para expulsar el aire que, con el tiempo, se va a cumulando en el circuito y los radiadores de la calefacción de la casa, que impide el calentamiento idóneo del agua y, por tanto, su eficiencia energética. Con estos sencillos pasos para purgarlos, conseguirás evitar estos problemas y aumentar la vida útil de tu instalación.
Guía para purgar los radiadores de la calefacción central
1. Antes de empezar…
Si tienes contratado un servicio de mantenimiento (gratuito en muchos casos) seguramente ya se hayan encargado de poner a punto tu caldera y el sistema de calefacción, pero no está demás revisar el color de la llama (azul para gas y amarillo para gasoil) y que la presión se encuentre entre 1 y 1,5 bares.
Antes de empezar el purgado, enciende la calefacción y espera un par de minutos para que el agua empiece a circular por todo el circuito de calefacción.
2. Purgar los radiadores
Partiendo del radiador más cercano a la caldera, accede a la válvula de purgado, ubicada generalmente en el lateral del difusor de calor. En la imagen puedes ver el tornillo que deberemos girar para expulsar el aire acumulado.
Antes de abrir la válvula, coloca un recipiente justo debajo, ya que durante la expulsión del aire también saldrá parte de agua del circuito. A continuación, con un destornillador de punta plana o una moneda, gira el tornillo en el sentido contrario de las agujas del reloj. El aire mezclado con el agua comenzará a salir a empujones. Cuando solo salga agua, cierra la válvula y repite la operación en cada uno de los radiadores hasta llegar al más alejado de la instalación.
3. Últimas comprobaciones
Cuando termines, revisa de nuevo la presión de la caldera, ya que al haber expulsado el aire es provable que haya bajado. Si no llega a 1 bar, es el momento de llamar al servicio técnico para que revisen la instalación antes de hacer un uso intensivo durante el invierno, ya que no rendirá al máximo y derrocharemos energía y dinero.
Últimos consejos para un uso correcto de la calefacción
Si todo ha ido bien, con estos sencillos pasos tendrás lista tu calefacción para mantener caliente tu hogar durante el invierno, y podrás estar seguro de que realizarás un consumo eficiente sin gastar un euro de más. Por último, recuerda:
- No coloques objetos encima de los difusores (no son un tendedero ni una tostadora de pan. Sí, lo hemos visto).
- Apaga la calefacción 10 minutos antes de salir de casa o al acostarte para aprovechar el calor residual sin consumir energía.
- Ajusta el termostato entre 24 y 26 grados para mantener una temperatura idónea en toda la casa.
- Cierra las ventanas y las puertas para evitar la fuga de calor.
- Comprueba el color de la llama con regularidad.
- Apaga la caldera si hueles a gas y llama al servicio técnico ante cualquier anomalía.
Imagen | Don Meliton
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